En la entrevista que le hicimos al Lic. en Psicología y docente Emilio Ruiz, le consultamos sobre cuáles cree que son los mitos más nocivos en relación a las personas con síndrome de Down, y nos respondió: “El primer mito que yo quiero clarificar es que todas las personas con síndrome de Down son iguales. Esa idea de que como conozco a uno, conozco a todos”.
Los mitos del NO y los mitos del SÍ
Ruiz cita a Jesús Flórez, quien habla de una evolución de los mitos a lo largo de la historia, y comenta que antiguamente se hablaba de los mitos del NO.
Los mitos del NO querían decir que cuando nacía un bebé con síndrome de Down, el médico les decía a los padres que no iba a ser capaz de hablar, de andar, de comer solo, de vestirse, ni de jugar: “no digo nada de si va a ser capaz de leer o de trabajar, impensable en otra época”, agrega, y asegura: “Estos mitos se han ido derribando uno a uno. Todos los padres saben que su hijo hablará, que su hijo caminará, que su hijo en la mayor parte de los casos leerá, que muchos de ellos llegarán a trabajar”.
Pero destaca que esto se fue a otro extremo, que es el de los mitos del SÍ, “de creer que lo van a poder hacer todo”. Y dice que ya hay una corriente en la que se considera que, si te esforzás, podés ser capaz de cualquier cosa: “todo lo que pretendas lo conseguirás, lucha y será tuyo”. Pero asegura que eso de los mitos del SÍ también es falso:
-“Todos pueden leer, todos pueden escribir. Tenemos un grupo de niños que no sabemos por qué no alcanzan a leer. Son minoría, es verdad.
–Todos pueden trabajar.Ahora mismo no estamos consiguiendo que todos trabajen. Por decir una cifra, diría que en España el 20% está trabajando. Porque ellos no pueden, porque no hay empresas adaptadas a sus características, porque no les dan la oportunidad, pero no todos pueden trabajar.
– Todos pueden estudiar una carrera universitaria. Eso no es cierto. De hecho, es algo excepcional, único, y a mí me parece que podríamos decir todo lo contrario, que no pueden estudiar una carrera universitaria, eso es falso”.
Entonces, Ruiz asegura que los mitos del “NO, no pueden hacer nada”, se cambiaron por los mitos del “SÍ, que lo pueden conseguir todo”, y destaca que estamos en ese “difícil equilibrio”.
El mito de los niños eternos
Lo que el Lic. En Psicología quiere deshacer es el mito de los niños eternos, “eso de que son angelitos de Dios, que todo es bondad”. Asegura que es cierto que algunos son angelitos de Dios, pero que otros son diablitos porque no hay quien los aguante: “Como todos los demás niños: habrá ratos en los que es un angelito y otros ratos en los que acaba con nuestra paciencia”, sentencia.

Lo que Ruiz aconseja a los padres es que sería bueno que más que creer que son angelitos de Dios o una bendición que ha llegado a sus vidas, crean en ellos: “que crean en ellos como niños que son, que tendrán sus limitaciones y sus propias cualidades”.
A su vez, destaca la importancia de que los padres confíen en sus hijos/as como niños/as que tienen mucho que alcanzar.
“Los padres que llevan a su hijo de la mano no creen en él”, sentencia. Y agrega: “En los colegios, cuando se pone un maestro sombra al lado de un niño con síndrome de Down, no cree en él, sigue pensando que son eternos niños que siempre van a tener que ir de la mano o siempre van a tener que tener alguien al lado que los apoye”.
Dice que es el mito que más le preocupa, y no duda cuando comenta que los padres que dejan a sus hijos/as hacer y equivocarse han superado este mito de los angelitos de Dios y creen en ellos, dejan que se tropiecen, que caigan y que se tengan que levantar.
Los mitos en docentes
En cuanto a los mitos en docentes que hay que superar, el también docente Emilio Ruiz expresa: “Yo creo que hay muchos mitos añadidos a este de los angelitos de Dios, que para qué les vamos a pedir que se esfuercen porque es un angelito y su bondad lo llena todo: el mito de la falta de fe, de la falta de confianza”.
Y asegura que los maestros/as y profesores/as que son exigentes y les piden cada vez más a sus alumnos/as con síndrome de Down son los que creen en el niño/a: los profesores más duros son los que más fe tienen en el niño/a. “Esos maestros que piensan que no va a poder conseguir nada, lo envuelve en un halo de santidad creyendo que va a ser un angelito y no le va a exigir nunca”, agrega. Aunque también aclara que hay maestros que no se sienten seguros, no saben cómo responder a ese perfil, no saben cómo trabajar con sus alumnos con síndrome de Down, y esa inseguridad hace que prefieran no profundizar.
Para finalizar, Ruiz asegura: “El mito de la falta de confianza va unido al de los angelitos, entre los padres y entre los maestros”.
En ASDRA decimos que “como veamos a nuestros hijos, los verá el mundo”. Por eso, la importancia de reflexionar sobre estas cuestiones que están instaladas en nuestra sociedad y en las que podemos estar incurriendo inconscientemente.
¿Qué opinás sobre este tema? ¿Te encontrás con personas atravesadas por estos mitos en nuestra sociedad?
Gabriela Vidal
Amo a Emilio! He aprendido tanto de él, escuchándolo! Tiene, además de mucho conocimiento, un carísma único para transmitir su mensaje.
Si no lo vieron, recomiendo buscarlo en Youtube y escuchar alguno de los videos que hay posteados. Un genio!
Muy buen artículo… Gracias!
lauines
Es clarísimo, yo tuve la suerte de escucharlo en persona, y es muy claro, también muy humilde. Habla de lo que sabe.
Es impresionante cómo muy fácilmente podemos pasar de un modelo (el de los mitos no) a otro (el de los mitos sí). Queda el arduo trabajo de hilar fino y buscar el punto medio. Siempre buscando el bien de nuestros niños.